lunes, 6 de abril de 2015

Puentes como liebres y otros cuentos, Mario Benedetti. Prólogo Gonzalo Garcés.

Mario Benedetti.
Puentes como liebres y otros cuentos.

Prólogo
Para acabar con la inocencia...

Es raro dedicar una antología de cuentos de Benedetti a lectores jóvenes, pues los jóvenes buscan perder la inocencia con libros como los de Charles Bokowski, lectura donde se tratan temas de sexo, drogas, etc. En los cuentos de Mario, estos temas no se tratan, pero en ellos también existe una manera de perder la inocencia, ¿quién iba a pensar que un viejo, con mirada tierna y romántico  como él no era tan inocente como pensábamos?. 
Mario Benedetti refleja en estos cuentos una forma distinta de perder la inocencia. Después de releer estos cuentos me dí cuenta de como cada uno de los personajes pierde su inocencia, pasando por un perro, niños y hasta adultos. 
Por ejemplo en el cuento "esa boca", el chico llora porque los payasos no lo hacían reír, pero esto no es cierto, él llora porque distingue "bajo la risa pintada del payaso" la boca vieja, cansada y derrotada de aquel hombre y ya no verá otra cosa.
También, José Claudio, en el cuento "Los pocillos", ve lo que no debía ver, José Claudio es "ciego", o eso se supone. Lo que él ve, que no debía ver, le hizo borrar su felicidad, hubiera sido mejor no ver.
Y así transcurre en los demás cuentos de este libro, en cada uno se pierde la inocencia, de una manera triste. Lo que me enamora de estos personajes es que decidieron abrir los ojos y darse cuenta de la verdad, a no quejarse por lo que no debían ver, o por la manera en que cada uno de estos personajes perdió la inocencia, para mí, eso es un acto de valentía. 
                                                                                                                                          -Gonzalo Garcés



Este libro contiene 11 cuentos:

- Esa boca
-Se acabó la rabia
-Los pocillos
-Réquiem con tostadas
-A imagen y semejanza
-Para objetos solamente
-Acaso irreparable
-Cinco años de vida
-Las persianas
-Puentes como liebre
-Todo lo contrario



Mario Benedetti.

Mario Orlando Hardy Hamlet Brenno Benedetti Farrugia (Paso de los Toros, 14 de septiembre de 1920 - Montevideo, 17 de mayo de 2009), más conocido como Mario Benedetti, fue un escritor, poeta y dramaturgo uruguayo, integrante de la Generación del  45, a la que pertenecen también Idea Vilariño y Juan Carlos Onetti, entre otros. Su prolífica producción literaria incluyó más de 80 libros, algunos de los cuales fueron traducidos a más de 20 idiomas.


Gonzalo Garcés.

Gonzalo Garcés. (Buenos Aires, 1974) es un escritor argentino.
Estudió Letras Modernas en La Sorbona y filosofía en la UBA. Su novela Los impacientes recibió el premio Biblioteca Breve en el año 2000. Publicó también las novelas, Diciembre (1997). Con la siguiente, Los impacientes. El Futuro (2003), El miedo (2012) y Hacete Hombre (2014) .
Ha colaborado en medios de España y América Latina como La Nación, Clarín, El Mercurio, Reforma, Brecha, Gatopardo, Perfil, El País o Quimera.






Resumen de cada uno de los cuentos.

-Esa boca...
1995. 
Carlos es un niño de 7 años, había esperado dos meses para ir al circo, tenía un gran entusiasmo por ver este por primera vez. Sus dos hermanos mayores y amigos de la escuela ya lo habían visto e imitaban las graciosas desgracias de los payasos y los contorsiones y equilibrios de los forzudos. 
Entonces Carlos decide decirle a su padre que lo lleve a el circo, su padre acepta, pero con la condición de no ver a ningún trapecista. 
Cuando fueron al circo, en el acto de los payasos, uno de estos se le acercó demasiado a Carlos, bajo el maquillaje de payaso, vio una boca cansada, pero luego se transformó en una sonrisa. Antes de el acto de los trapecistas, Carlos y sus padres salieron del circo, Carlos se puso a llorar, su madre le preguntó "¿es por los trapecistas? ¿tenías ganas de verlos?", pero él explicó que lloraba porque los payasos no lo hacían reír. 

-Se acabó la rabia...
1956.
Trata de la relación de una pareja, desde la vista de su perro, Fido. 
Fido no pertenecía a una raza definida, pero era un animal disciplinado y consciente. 
Este perro fue testigo de la infidelidad de la esposa de su amo, pues ella metía a la casa a su amante, mientras su amo no estaba.
Un día Fido guió a su amo a un cenicero, perteneciente al amante, entonces he aquí que este se enteró de la infidelidad de su esposa, dándole una patada en el hocico a Fido, debido a la rabia que le dio. 

- Los pocillos...
En Montevideo, 1959.
Trata sobre José Claudio, un señor que era "ciego", sobre su esposa y su hermano.
Enriqueta le dio seis pocillos a Mariana, esposa de José Claudio, dos rojos, dos verdes y dos negros, con sus respectivos platillos, por motivo de su cumpleaños. 
Desde que José Claudio quedó "ciego", Mariana empezó a tener una relación mas cercana con su hermano Alberto, pues empezó a sentirse segura con él, cada vez más. Ella y Alberto empezaron a tener una relación muy cariñosa, él le daba caricias a ella, mientras José Claudio tomaba café.
Y un día antes de servir el café, Alberto y Mariana se acariciaron tiernamente; hasta que la mano de él  llegó hasta su boca y le besó la palma de la mano, fué ahí cuando José Claudio pidió su café (ese día le tocaba verde a su esposo, negro a Alberto, y rojo a ella); a la hora de darle el posillo a su esposo, él dijo "No querida. Hoy quiero tomar el el posillo rojo".

- Requiem con tostadas...
En  la muerte y otras sorpresas, 1968.
Este trata de la historia de una familia que vivía muy mal, contada a través de uno de sus personajes, Eduardo. Este le relata su historia a el novio de su madre. 
Su padre era un hombre que se la pasaba borracho, cada vez que llegaba a su casa, tarde en la noche, golpeaba a su madre, sus hermanitos le tenían miedo a su padre, pero ella no lloraba, porque algo la hacía feliz entre tanta mierda. 
Pero un día Eduardo se dio cuenta de que su madre lucía más feliz, él decidió escapar de su trabajo y seguirla, para averiguar el por qué, ahí descubrió que su madre era feliz porque tenía un novio, por fin tenía alguien quien la amara y la respetara, pero Eduardo no se dio cuenta que su padre lo seguía para castigarle, lo cual provocó que este también se enterara de esto. Fueron tan grandes los celos y la rabia del padre, que acabó por matarla; él terminó en la cárcel. 
"Ahora estoy seguro de que hice bien. Porque usted está llorando, y, ya que mamá está muerta, eso es algo así como un premio para ella, que no lloraba nunca".

- A imagen y semejanza...
En la muerte y otras sorpresas, 1968.
Este trata sobre una hormiga, de la observación de su tan agotador trabajo.
Ella y sus compañeras seguían el camino, pero desde lo alto calló un terrón de azúcar, ella trataba de llevar el terrón de azúcar, pero siempre resbalada o el viento soplaba, haciendo que el terrón de azúcar se descoronara cada vez más. Cuando ya no había terrón de azúcar, se atravesó un palito, ella trató de correr el palito durante mucho tiempo, cuando de repente aparece un dedo humano aplastando carga y hormiga.




- Para objetos solamente... 
Las cosas tienen un ser vital. Rubén Darío. 
En la muerte y otras sorpresas, 1968.
En este cuento se describe el inventario de una habitación de un apartamento o una casa. En el inventario se encuentra una carta partida a la mitad que habla sobre la depresión y melancolía de una mujer. En esta habitación ocurrió un suicidio, pues en el suelo está el cuerpo sin vida de una mujer, al lado de un pañuelo rojo.

-Acaso irreparable...
En la muerte y otras sorpresas, 1968.
En este cuento hay un señor llamado Rivera, que tiene que viajar para dar unas conferencias en el extrajero, pues con esto le darían un asenso en su trabajo. 
Pero el vuelo de Rivera no pudo salir ese día, Rivera sintió mucha rabia, pero al final se resignó y lo aceptó. La agencia de viajes del vuelo le daba vales de cortesía para las comidas y el hospedaje en el hotel, al día siguiente salía el bus hacia el aeropuerto, temprano en la mañana, pero otra vez, el avión presentaba fallas mecánicas, y se volvió a retrasa el vuelo para el otro día. Y esto pasó por varios días, haciendo que Rivera se acostumbrara y se resignara de tomar su vuelo y a querer ser el primero en la fila para recibir los vales y para que le dieran el mejor cuarto en el hotel.
Desde un principio Rivera cargaba una foto de su hijo, y recordaba a su esposa, pero con el paso del tiempo la imagen de su esposa se le iba borrando de la memoria. 
Un día, haciendo la fila en la recepción para recibir el vale, vio a dos jóvenes bajar de su vuelo, y ella le preguntó por su nombre, el le respondió "Eduardo Rivera" y él le dijo que se iba a quedar un año ahí, luego después de un ruido, Rivera le escuchó decir a Eduardo que su padre había fallecido en un accidente aéreo hace años.  
(En mi opinión, Rivera era el padre de Eduardo y que había muerto ahí, por eso su vuelo no partía, y debido a su muerte, la imagen de su esposa se le iba borrando de la memoria).

-Cinco años de vida...
En la muerte y otras sorpresas, 1968.
Trata sobre una pareja que se queda atrapada en un metro, en este, ellos se empiezan a conocer y platicar sobre sus vidas, se empiezan a gustar, tanto que el señor corta a su esposa por ella, pero al pasar el tiempo de volada se da cuenta que ya no la quiere como antes, como hace cinco años atrás. 
    
-Las persianas...
En con y sin nostalgia, 1977.
Mario es un señor que vive en una unidad residencial.  Es poco sosiable, sólo habla con pocos vecinos, de los 64 apartamentos que hay, en las reuniones comunitarias, un periodo de cinco minutos y ya. Pero hay una señora llamada Galván, su vecina de enfrente, con la cual hace un "rito" cuando cierra sus persianas y hacen un saludo con la casbeza. 
Marcelo llega de la reunion a su apartamento y enciende la televisión; pasa de canal en canal y al final lo apaga.
Hace mucho calor y se desnuda, empieza a bailar y hace un show vergonzoso, luego se queda dormido. Al despertar, lo hace asustado, pues sus persianas (las que cerró anoche) estaban abiertas, y no hace mas que pensar en si su vecina lo vio desnudo y le da temor saber en lo que ella puede pensar sobre él. Luego en el asensor, entra su vecina y no se dicen nada, evitan contacto visual, ella decide hablarle y luego le dice que la disculpe, por no haber cerrado las persianas del apartamento de ella. 

- Puentes como liebres...
Iremos, yo, tus ojos y yo, mientras descansas, bajo los tersos párpados vacíos, a cazar puentes, puentes como liebres, por los campos del tiempo que vivimos - Pedro Salinas.
En geografías, 1984.
(Este cuento se divide en cinco capitulos)
Trata sobre un chico llamado Leonel que se va al extranjero a los 16 años en barco, durante este viaje conoce a Celina una muchacha muy bonita de callo roizo y delagada, ellos se enamoran pero no pasa nada, es más se decían "hermanos". Pasaron siete años cuando el trabajaba como mecánico y ella lo fue a visitar, y se citaron en la casa de Leonel pero tampoco pasó nada solo llegaron a un beso. Pasó nuevamente el tiempo y el ya no se dedicaba a los fierros si no que ahora había abierto una glería de pintura llamada "La Paleta" donde Celina fue con su nuevo esposo que era arquitecto pero no tuviero mucho tiempo de hablar solo ella le pudo decir que no estaba bien. Nuevamente se encontraron en la calle después de unos años pero solo él la vió de lejos ya que había una muchedumbre y finalmente se volvieron a encontra despues de muchos años, ella ya tenía 51 pero fue metida a la carcel acusada de servir de correo internacional, al servicio de actividades "subversivas" salió a los 3 años osea a los 54 años y se divorció de su esposo y ahora se vieron en el ferrocarril pués se habían citado ahí y nuevamente se conocieron mientras tambie´n hubo declaraciones en la que ella dijo que siempre lo había amado nuevamente como escena de película romántica hicieron el amor en el ferrocarril.

-Todo lo contrario...
En despistes y franqueses, 1989.
Trata sobre un alumno que es muy inteligente y se lo demuestra a su profesor, dandole a entender que también tiene los conocimientos del profesor. Al profesor le disgusta pensar en que su alumno puede ser más inteligente que él.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario